RETIRO ESPIRITUAL AMAZÓNICO 4: EL TRABAJO CON PLANTAS MAESTRAS


RETIRO ESPIRITUAL AMAZÓNICO 4: EL TRABAJO CON PLANTAS MAESTRAS

Util o no para el contexto occidental, los habitantes de la amazonía peruana vienen curando sus problemas de salud, desde hace milenios por medio de las dietas y las plantas medicinales. Estas depuran el cuerpo físico con alimentos bajos en sal y en calorías. Por ello, la primera parte del trabajo de dietas es la desintoxicación del propio cuerpo. Luego, las plantas maestras que se ingieren dependiendo de su finalidad, van a ser sugeridas por el propio curandero luego de haber evaluado cada caso minuciosamente. Para los maestros curanderos es común el suministro ocasional de la ayahuasca durante la dieta, pues encuentran a las personas más predispuestas y sensibles a los efectos de esta planta de poder. La ayahuasca es una bebida psicoactiva que induce a estados no ordinarios de consciencia y que depuran el cuerpo de manera efectiva. Otra de las plantas que se hace presente dentro del contexto de la dieta, es el tabaco, pues es al igual que la ayahuasca es un aliado que va a darle fortaleza al cuerpo y le va a permitir abrir el canal de los sueños en el mejor de los casos.

Las plantas de dieta aunque podrían clasificarse en plantas depurativas, eméticas, fortificantes, visionarias y de limpieza energética, no se limitan a una única función, por que el efecto de cada una de ellas tiene repercusión en todas las áreas en mayor o menor medida: a nivel físico, emocional, mental y espiritual. Sin embargo, para el chamán amazónico, conocedor de este saber milenario no existen mayores dudas en emplear una o dos plantas que muy bien podrían complementar un mismo tratamiento.

El trabajo con plantas maestras corresponden en este caso, al contexto de la medicina tradicional amazónica. En ningún caso se afirma en el presente artículo que las plantas puedan ingerirse fuera de ese contexto. Al referirme a “contexto” me permito aclarar que corresponde a la región geográfica y al hábitat del poblador amazónico dentro de las fronteras peruanas, en donde el uso ritual-ceremonial es permitido y constituye un patrimonio cultural intangible. El autor del presente artículo discrepa con el hecho de trasladar el uso de plantas amazónicas fuera de ese contexto, no sólo porque la propia ley occidental prohibe toda forma de consumo local y la reprime penalmente, sino más bien al hecho evidente que las plantas maestras tienen un contexto sagrado que se debe respetar, para lo cual se debe cuidar minuciosamente su ritualización y el manejo apropiado por maestros y chamanes auténticos.